Dudamel es un ejemplo

Escribir sobre Gustavo Dudamel es largo y no sabemos por donde comenzar. Es una persona pública que nos ha representado muy dignamente por el mundo. Una persona joven, llena de responsabilidad y con muchos logros alcanzados. Es un orgullo tener a este personaje entre nosotros y que sea venezolano, nació para esto y tiene una gran vocación.
En cualquier parte del mundo que se presenta nos deja una gran satisfacción y nos deja muy en alto. Cada vez que dirige alguna sinfónica lo hace con un amor y una entrega única.
Sus estudios, sus logros, sus metas fueron superadas y lo más importante es tener a un grupo de jóvenes que junto a él han podido vivir una experiencia inolvidable para todos ellos y para Venezuela.
Al frente de las Orquestas Juveniles e Infantiles, Coros Juveniles, Coro de manos blancas y cuatro solistas, Gustavo Dudamel dirigió un concierto que incluyó el Gloria de Vivaldi, el Ave Verum de Mozart, del último movimiento de la Novena Sinfonía de L.U. Bethoven y el Aleluya de Handel frente a la Catedral Metropolitana de Barquisimeto. Fue nominado a un premio Gramy Latino con un CD que grabó en 2008.
Dudamel ha recibido muchos premios, invitaciones y reconocimientos. Le confirieron el Doctorado Honoris Causa por sus logros alcanzados en la música.
Con su personalidad, su sonrisa, su carisma y su porte sencillo Gustavo Dudamel es un venezolano que nació para triunfar, que su vida es la música y sus orquestas; me siento orgullosa de que un compatriota mío sea lo que es.
Lo admiro, lo saludo y ojalá pudiera conocerlo personalmente, estrechar su mano y darle un abrazo a quien se lo merece por ser un ejemplo de tantos niños y jóvenes que lo respetan. Gracias a usted los niños quieren a la música y a sus instrumentos. Dios lo bendiga y alumbre su camino siempre.

Isabel Báez
Ama de casa, vocera de un consejo comunal en el 23 de Enero.
ana09111@gmail.com.