Quebrada de Chacaíto

Caracas es una ciudad privilegiada, está arropada y protegida por el Parque Nacional El Ávila, o como lo llamaban los indios Caracas: Warairarepano o Guarairarepano, como coloquialmente le decimos los que lo amamos y visitamos todos los días, ya sea para ejercitarnos, divertirnos, caminar o simplemente para comenzar bien el día con una buena y saludable actividad.
En sí misma tiene muchísimas cosas atrayentes, su clima, el paisaje, el silencio, la libertad, su flora, su fauna, aunque esto es más difícil de ver ya sea porque están durmiendo o se esconden; sin embargo, las guacharacas, las mariposas, los querrequerres y algunas otras aves siempre se asoman curiosas, al paso del caminante.
Una de las cosas que me llaman más la atención es el agua que abunda por todas partes, tan fresca y pura que una la bebe en los puestos de guardaparques con confianza y sin temor.
Pero ¿de dónde viene esta agua? Bien, es la llamada quebrada de Chacaíto y sus manantiales que están muy arriba, a 2.300 metros, específicamente en un punto llamado Lagunazo, donde es muy fácil llegar caminando aun con poco entrenamiento, ya sea desde el poblado de Galipán, desde Sabas Nieves por la Fila de la Montaña hacia el Oeste, o desde la estación Ávila del teleférico caminando la Fila hacia el Este.
El nombre Chacaíto se relaciona al cacique Chacao, un cacique local que luchó contra los conquistadores. Tiene la quebrada también connotación política, ya que ella físicamente separa al Distrito Capital del estado Miranda.
A partir de un sitio llamado Boquerón la quebrada penetra y coincide hasta llegar al valle con la falla geológica Humboldt o Los Palos Grandes, y dicen los expertos que esta falla es causa de los "movimientos que a veces sufre la capital y causan tanto daño (el último fue el 29 de julio de 1967). La quebrada no baja en línea recta ni oblicua, al contrario se precipita por muchos saltos y cascadas, se encajona entre altas y empinadas paredes de piedra que cayendo verticalmente son de peligro erosivo.
Su cauce lleva grandes piedras que llegaron allí luego de varios eventos, ellas forman grandes pozos ideales para el baño, agua fría, fresca, cristalina. Ideal para darse un chapuzón luego de una caminata larga y calurosa.

Edilia C. de Borges
Montañista
Hab. Palos Grandes