Hoy en día, optar por un cupo en una universidad es un reto que se ha suavizado en los últimos años, lo que permite el ingreso a la educación superior o universitaria a parte de la población flotante o bachilleres recién graduados.
Las autoridades han hecho un trabajo arduo por tratar de incluir en las universidades a un gran número de bachilleres dispuestos a estudiar y graduarse en las diferentes carreras que se dictan en nuestras universidades, pero, como siempre, hay algo que obstaculiza el camino a muchísimos estudiantes ¿Cuál será ese obstáculo? ¿Será la falta de universidades? ¿o será la falta de cupos? Si bien es cierto que el Gobierno nacional ha puesto empeño para que el ingreso a este nivel educativo sea flexible, no ha puesto énfasis ni ha acabado con el problema que aqueja a muchos estudiantes recién graduados, y es la entrega a tiempo de sus títulos, requisito indispensable para ingresar a cualquier universidad.
Por ejemplo, podemos hablar del caso de los que estudiaron en el Instituto Radiofónico Fe y Alegría (Irfa), que todavía con un año de graduados no les han entregado sus títulos de bachilleres y cuando los graduados van a solicitarlo, lo primero que les dicen es que el Ministerio de Educación no los ha firmado.
Entonces el llamado es al Ministerio de Educación para que aclare el por qué no firman dichos títulos y así darle a esos bachilleres la oportunidad de ingresar a una universidad en el momento en que se le presente la oportunidad y así no perder tiempo, cosa que no se recupera nunca. ¿Acaso omiten las órdenes del Presidente de facilitarle a la población de estudiantes todo para estudiar? De ser así, no sólo desobedecen órdenes del Primer Mandatario, sino que irrespetan la Ley Orgánica de Educación. Así que, señores, pónganse las pilas porque se trata del futuro del país.
Deulis Velásquez
Estudiante universitario
Habitante de Catia
cirilo.660@hotmail.com
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