Caminando por la plaza Caracas, observé con preocupación el deterioro y el deplorable estado en que se encuentra el piso de las caminerías adyacentes a la plaza, las cuales forman parte del Centro Simón Bolívar. Cualquiera que pase por ese lugar puede pensar que las caminerías fueron perforadas por unas bombas o minas antipersonales.
Si bien es cierto que la plaza Caracas fue recuperada y se desalojaron a los comerciantes informales, hoy la realidad nuevamente es la misma que hace año y medio. La presencia de buhoneros ya es visible y las autoridades (la Policía Nacional) se hacen los locos y dejan que esas personas se asienten allí dañando los pocos espacios del Centro Simón Bolívar que han sido rescatados para el comercio formal y los ciudadanos.
En las adyacencias de la plaza Caracas están ubicados dos ministerios, el de Salud y del Trabajo, y la oficina del Saime, además del CNE; pero a pesar de ello a ninguno de esos entes parece importarle el retorno de la economía informal a la plaza y mucho menos el grave deterioro en que se encuentran otros sectores del Centro Simón Bolívar.
Por lo anterior, hago un llamado a los organismos a los cuales les compete la reparación de los espacios capitalinos y la seguridad en la zona para que se den un paseo por allí y resuelvan esas anomalías.
Miriam Cuevas
Internacionalista, habitante de La Pastora
mairimc27@yahoo.com
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