CUANDO EL DERECHO ES PARA TODOS

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es muy clara con respecto a los derechos civiles. Así tenemos que en el artículo 59, el Estado garantiza la libertad de religión y cultos; el Artículo 5º reza que “Toda persona tiene derecho a transitar libremente.Artículo 53: “Toda persona tiene derecho a reunirse libremente, así como el artículo 57 que dice que toda persona tiene derecho a expresar libremente su pensamiento. Así podemos seguir enumerando hasta llegar al artículo 58 que garantiza la libertad de religión y de culto, y su manifestación o proyección en privado o público, esto siempre y cuando no se opongan al orden público, tal como reza la Carta Magna. Y a esto me voy a referir: en el Parque Nacional Guaraira Repano, sitio de esparcimiento y recreación, hay muchos senderos, específicamente hay uno que lleva al caminante o excursionista a un sitio privilegiado. La Cascada de Pajaritos.Un lugar donde los que le visitamos nos sentamos a ver y oír caer el agua desde arriba y sobre una gran piedra mientras descansando tomamos una merienda.Pero, esto ya no se puede hacer, los domingos a partir de las 10:30 am, y desde hace varias semanas una se encuentra con una escena que contrasta y desentona con este objetivo. Allí en un sitio despejado, el único que hay, se instala una secta religiosa de yoga impidiendo el libre paso porque las alfombras de los participantes se toman todo el lugar; una tiene que pasarles por encima, infringen la Ley de Parques porque instalan un hornillo con fuego donde se quema el incienso, cerca de maleza seca.El olor de los palillos satura el perfumado aroma de la vegetación, y el silencio es roto por un mantra repetitivo y tenebroso que rezan todos los participantes, que son alrededor de 25 personas adultas. Lo soporté estoicamente sentada en una no muy estable piedra, obligada sin querer a oírlo, porque estaba cansada y no podía seguir caminando en ese momento. No todas las personas pertenecemos a un mismo culto, y este grupo de yoga se reúne todos los domingos a perturbar la paz de quienes solo queremos paz.Tengo entendido que los parques son para la recreación y esparcimiento de quienes los visitan; sin embargo, acá esto no se está cumpliendo. A los que caminamos hasta la quebrada de Pajaritos, se nos está negando este derecho. Y eso es sagrado, queremos sentirnos libres y felices en la naturaleza, libres de religiones, politiquerías, bailes, y todo lo que rompe con la armonía del hombre y la montaña.

Edilia C. de Borges
Montañista
Hab. de Los Palos Grandes
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