El mejor lugar: la escuela

Está por comenzar un nuevo año escolar y todos, de una u otra manera, regresamos a clases. Los padres que nuevamente tienen que disponer de todo lo necesario para este nuevo período escolar: uniformes, útiles, y todos los implementos para llegar preparados a la escuela.
Asimismo, destinar quién cuidará de los más pequeños de la casa mientras trabajan, puesto que ya no podrán ser vigilados por los hermanitos más grandes. La que expende golosinas y otros snacks a la puerta de la escuela, el conductor del transporte público que ve cómo entra en recesión y merman sus ingresos diarios en temporadas de vacaciones escolares, los comercios especialistas en el ramo de la papelería que de igual forma bajan sus ventas, y por supuesto, los maestros, maestras, personal administrativo, de mantenimiento y directores que tenemos la responsabilidad compartida de cumplir y hacer cumplir los lineamientos emanados desde el Ministerio de Educación.
Como vemos, la escuela no es estática, es un ente vivo, dinámico, que se mueve y mueve a un conglomerado donde convergen otras instituciones como el Consejo de Derecho del Niño, Niña y Adolescente, las alcaldías, las organizaciones comunales, Policías, institutos de Tránsito Terrestre e instituciones prestadoras de servicios públicos.
 Próximamente, en todos los rincones del país se abrirán las puertas de los planteles, llenos de las expectativas que trae consigo cada año escolar, pero con la plena seguridad de que son el lugar por excelencia mas idóneo para todo niña y niño, y eso se pone de manifiesto cuando la madre o padre de cada estudiante lleva a su retoño y se marcha confiado de haberlo dejado en el mejor sitio y las mejores manos: las de sus maestros.
No debe existir ningún niño sin escolarizar; no dejemos que se pierda la oportunidad de desarrollar el potencial que hay en ellos y aunque su ritmo de aprendizaje sea más lento con relación a otros, proporcionémosles herramientas para adquirir las competencias necesarias y puedan de ese modo demostrar sus actitudes como ciudadanos aventajados, y esto se logra solo allí, no en la calle.

Nilde Liendo
nildev010@hotmail.com