Navidad, tiempo de humildad

Comercialmente, esta temporada navideña refleja la oportunidad idónea de promocionar productos y servicios con la intención de aumentar las ventas del mercado mundial sin importar el rubro.

Muchos aprovechan este tiempo para adquirir todo lo que en el año no han podido comprar; sin embargo, existe el caso de personas que despilfarran cantidades de dinero sin pensar en el futuro y en las consecuencias que eso pueda generar, por no darle su lugar a cada cosa y dejarse llevar por el patrón del consumismo.

La Navidad sobrepasa cualquier necesidad material e impulso comercial, cuyo ícono obedece a un aspecto económico propagado por símbolos publicitarios que influyen en la necesidad de lujos y objetos que son absolutamente innecesarios.

Esta es una temporada donde la humildad debe cobrar sentido, porque son los cimientos que caracterizan el último mes del año y que tienen que prevalecer en el transcurso del calendario.

Una muestra ejemplar y acertada es el nacimiento del niño Jesús, la cual demuestra la sencillez, la humildad y la caridad que compone al ser humano. Nació en un establo rodeado de animales sobre un pesebre únicamente rodeado del amor de sus padres y la visita de los tres Reyes Magos, quienes les llevaron presentes para darle la bienvenida a esta tierra, y así podemos continuar hasta detallar el resto de su estadía en el mundo, reflejo de la caridad y obediencia de Dios padre según lo plasmado en las sagradas escrituras.

Actualmente, podemos evaluar el distanciamiento que tiene la humanidad con el significado real de la Navidad (nacimiento), ocasión propicia para renacer y proyectarnos a un mejor futuro, compartir con familiares, amigos y tender la mano a quien más lo necesite, momento ideal para darnos amor y amar al prójimo.

Para celebrar no es necesario tener todos los lujos, solo se requiere tener fe y esperanza. La llegada del hijo de Dios es el vivo reflejo del amor puro y sincero presente en cada uno de nosotros. Para todos, ¡feliz Navidad y próspero 2016!

César Alarcón
alarcon-blanco@hotmail.com