La acera estaba en mal estado y a punto de caer. Con la fuerte lluvia que cayó el 25 de junio los habitantes del edificio pensamos que el pantano iba a llegar a los pasillos de la planta baja.
El resultado fue que el parque se terminó de dañar, la cancha de bolas criollas quedó como terreno de motocross, la plaza ni hablar, y la parte trasera del edificio como si hubiese pasado una gran ola.
Los habitantes del Bloque 31 nos preguntamos: ¿será que tiene que ocurrir una tragedia? ¿O se debe caer la parte de la vía? ¿O taparse las alcantarillas y que la Zona E quede incomunicada? ¿Tendrá que suceder eso para que las autoridades responsables arreglen la vía? Es bueno recordarles que el cerro que está en la parte de atrás del bloque 31 está ahora igual o más peligroso.
William Jiménez
Bibliotecólogo
Hab. 23 de Enero
wjimenezw@hotmail.com
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