Sin lugar a dudas, la educación en Venezuela ha sufrido numerosos cambios a través del tiempo. Entre esos cambios, está uno que a mi parecer es el más importante: la enseñanza de los valores, la moral y la ética.
No quiero adentrarme en cómo desde el seno de la familia estos temas deben ser inculcados, ya que no se puede ser del todo objetivo.
Quiero mas bien tocar el tema desde el punto de vista de la educación escolar. Se sabe que la mayoría de nuestros educadores, diariamente y de una manera muy indirecta, tratan de enseñarles a nuestros hijos los diferentes valores que deben aprender, para que así crezcan como unos hombres y mujeres íntegros.
Ahora bien, cuando mi querida madre estudiaba, el pénsum escolar contenía una materia que se llamaba "Moral y cívica". Hoy en día se llama "Educación familiar y ciudadana".
Según pude aprender por conversaciones con mi madre y algunas de sus amistades, en aquel tiempo, como ahora, esa es no solo una materia que se imparte un solo año de la carrera básica y secundaria, sino también que es una materia "papayita" o muy fácil de aprobar.
¿Por qué muchos de los profesores que la imparten no le dan el mismo nivel de importancia que las llamadas "Marías"?
Creo con todas mis fuerzas que la familia es la base de la sociedad, pero también creo que la educación es la principal arma que tiene una sociedad para crecer y hacerse grande.
He visto con muchísima preocupación que en Venezuela existe una inmensa y profunda pérdida de los valores. No hay respeto por el prójimo. Se hace lo que cada quien quiere sin importarle a quién pisa o a quién se lleva por delante, tal cual como si viviésemos en un pueblo al mejor estilo del Lejano Oeste.
Los venezolanos debemos revertir esa situación y creer fielmente que, si estamos mejor instruidos integralmente, vamos a ser mejores en todo y tendremos todo el viento a favor para salir adelante.
@jss_fernandez
No hay comentarios:
Publicar un comentario