Día Mundial de No Fumar

Hoy, más que un recordatorio del Día Mundial de No Fumar, es la alerta sobre el grave daño que produce ese vicio indeseado, el cual ha crecido de manera considerable, en los últimos años, y se ha convertido en un problema de salud pública en todo el mundo.
Es una fecha para continuar avisándoles a los consumidores sobre la terrible consecuencia del consumo del tabaco en cualquiera de sus variedades. También hay que prevenir a niños y jóvenes, quienes caen rendidos ante esos espejismos al quedar confundidos con los mensajes erróneos que reciben a través de múltiples medios, los amigos y personas interesadas en cazar nuevos incautos para sembrar su vicio.
En nuestro país se observa tímidamente cómo algunas iniciativas, tanto públicas como privadas, dirigidas a la prevención del consumo del tabaco, carecen lamentablemente de la fuerza necesaria para lograr efectividad en el público más vulnerable y susceptible de sucumbir ante esa danza de elementos perjudiciales para la salud.
Por supuesto, el papel que juega la familia es fundamental en la orientación de los hijos. Asimismo, la escuela -en su rol supremo de educar- tiene una alta responsabilidad en esta materia. Los organismos gubernamentales deben mantener un llamado permanente en la prevención y consumo del tabaco y los organismos sanitarios proveer los insumos necesarios para la orientación de toda la población. Los medios de comunicación social también deben contribuir dando cabida en sus espacios a los mensajes de orientación.
Así que hoy, mañana y siempre recuerde que el tabaco es altamente perjudicial para su salud y la de su familia. Anímese a cambiar el mal hábito que lo daña, por otro que le brinde mayores réditos y mejor salud.
Dulce María Carpio
dulcecarpio@gmail.com
Urb. El Rosal, Chacao