El precio justo como instrumento jurídico es, a mi modo de ver, una imperiosa necesidad, y de aplicarse tal como está concebido, impactará significativamente en la inflación.
En tal sentido, y como argumento de lo dicho, quiero exponer el siguiente caso para el análisis y que bien pudiera estar ocurriendo en otros sectores del comercio nacional: la casa Suzuki, a través de sus aliados comerciales, está comercializando en los actuales momentos en Venezuela una motocicleta tipo Scooter, cuyo precio varía de la siguiente manera: en la agencia de San Antonio (Mir) su valor es de Bs 10 mil; en la de Sabana Grande (DC) cuesta Bs 11.200, y en Chacaíto, a escasos 150 metros de la anterior, su precio es de Bs 12.500.
Entonces me pregunto: ¿Cuál es el verdadero precio justo de dicha motocicleta?, ¿por qué tan rara la variación?, ¿Está enterado el Gobierno de esta situación?
Lo más insólito del caso es que esta rara fluctuación ocurre con otras marcas, como la Skygo; por ejemplo, basta revisar en los portales web que las ofertan.
Ahora bien, propongo para saber como ciudadano a qué atenerme respecto de los precios de las mercancías que el Gobierno obligue a las casas matrices que comercializan, en este caso, las motos en nuestro país, a publicar en la prensa nacional los precios reales de los mismos y obligar a sus casas comerciales aliadas a cumplirlos.
Igualmente, exigir que el Gobierno nacional asuma su responsabilidad con el pueblo en lo atinente al tema de la venta de motocicletas.
Educador
Habitante de San Antonio
rmacaira@gmail.com
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