Son muchas las características del venezolano que dan gratamente de qué hablar en el exterior, bellas mujeres, buen baseball, paisajes hermosos y la calidad de nuestra gente, y es precisamente la buena voluntad que tenemos lo que nos hace referencia en el mundo entero.
Sin embargo, para muchos el que una persona la tenga es sinónimo de debilidad, es una oportunidad para aprovecharse, e incluso es muestra de ser poco inteligente; es por ello el famoso dicho “el buena gente es tomado por tonto”.
Somos parte de un mundo donde se tiende a valorar la “viveza” por encima de la buena voluntad, donde se celebran más las acciones de aquellos que obran de esta forma y se hace a un lado a quienes solo obran por ayudar a otros, por lograr un bien común.
Esto quizás porque la viveza se confunde con la inteligencia, pero quiero dejarte en claro que son cosas totalmente distintas, quiero recordarte que no se es tonto ni menos que los demás por ser “buena gente”.
El actuar con buena voluntad te hace una persona inteligente (y más feliz).
En estos tiempos es necesario que avivemos la llama de la buena voluntad, donde encontremos más venezolanos comprometidos con la alegría de ser buenas personas y colocar su granito de arena para sacar adelante nuestro país y construir un mejor futuro.
Hoy entre los muchos valores que necesitamos rescatar debemos darle prioridad a ese “don” que Dios nos regaló y que hace sentir a gusto al extranjero cuando pisa nuestra tierra.
Hoy debemos recordar que Venezuela es sinónimo de buena voluntad.
Marcos Alejandro Sáenz Scala
Estudiante
Maracay, Aragua
SDJMarcos@hotmail.com
@SDJMarcos
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