Hace unos días visité el Museo de los Niños con mis hijos. Después de recorrer sus instalaciones, salimos a comer en las mesitas que están en las áreas verdes detrás del kiosco de comida, pero nos encontramos con que se ha convertido en el retrete de personas en situación de calle y de mascotas de los vecinos del sector. El llamado es al personal de seguridad de Corpocapital y del museo para que solucione tanto descuido.
José García
josgar2009@gmail.com
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