Viacrucis por la salud

Desde hace muchos años, enfermarse se ha convertido en un gran desafío tanto para el paciente como para sus familiares. Recorrer o saltar de una clínica a un hospital o de un hospital a otro hospital es un verdadero dolor de cabeza para todos los afectados.
A aquellas personas más "afortunadas", quienes cuentan con una póliza de seguro HCM a la hora de ingresar a cualquier clínica del país, lo primero que te exigen -bien sea en admisión o por emergencia- es llenar unos datos del paciente y del seguro con el que cuentas para esperar que te den la famosa clave, pues ahí comienza la odisea porque sin importar el nivel de la enfermedad (grave, moderada o iniciada), ni cómo uno se sienta, tienes igualmente que esperar largas horas durante el día para ser atendido.
Las personas menos favorecidas ni deben soñar con entrar a una clínica porque lo primero que te piden es una tarjeta de crédito o contar con mucho dinero en efectivo. En los hospitales pueden ocurrir varios escenarios, entre ellos: te atienden, no hay médicos que te examinen, faltan insumos (muchas veces dotan, pero por arte de magia se desaparecen), no existen los equipos suficientes para estudiar la enfermad del paciente o los médicos están de huelga.
Otro asunto es que muchas personas han experimentado lo que es tener algún familiar o conocido que padece de una enfermedad grave. Ingresan al paciente a una clínica, pero la cobertura de la póliza, por ejemplo si es de BsF 100.000, se te agota en tan sólo cinco días en cuidados intensivos.
Esa situación pone a correr a todo el mundo para conseguir una habitación en cualquier hospital. Mientras pasan los días en la referida búsqueda, la clínica sigue facturando y muchos de nosotros quedamos debiendo una alta suma de dinero a esos centros de salud.
Si bien es cierto, no sólo hace falta remodelar y equipar los hospitales de nuestro país, también se deberían construir otros ya que los existentes son los mismos de siempre y se han hecho insuficientes: Llanito, Vargas, Lídice, Algodonal, Pérez Carreño, Magallanes de Catia, San Juan de Dios y Victorino Santaella.
Pero de igual manera, la situación de los altos costos de las clínicas, la mala atención y demás problemas que estos presentan deben ser estudiados y mejorados rápidamente, ya que todo eso va en perjuicio del ciudadano común.

Alexander José Bello Sánchez
Habitante de La Tahona, municipio Baruta (Mir)
alexbello_5@yahoo.com